Pues a lo que iba. Resulta que un corto viaje sentimental de Italo Svevo me está gustando, sobre todo por su forma de tratar el hecho de viajar. En la novela el viaje se representa con dos fuerzas contrarias: por un lado como un ficción sobre uno mismo, sobre un suponer al mundo como algo que en realidad no es, y por lo tanto mantener una lucha constante para que ese mundo sea justo como nuestra imaginación supone que debería ser. Y por el otro lado sobre la llegada de todo aquello que se aparece como verdadero sin nunca antes ser imaginado. Otra cosa que me gusta es que refleja un mirada que parecería inocente, pero que a medida que suceden las cosas se ve que no lo es, sin embargo conserva las cualidades de la inocencia.

No comments: